Cantando en la calle Florida
un forastero en Buenos Aires
descubrí que la vida
es una eterna huída, sin más...
Por equipaje una mochila,
un pan francés y un queso de cabra,
buscando alguna bisagra
que me haga ser carpintero para que se abra.
Cómo olvidarme de Martha
aquella stripper de la Recoleta
Si me dejó un par de huellas
en el cuello y en la vida
Cómo olvidarme de Martha.
Me fui siguiéndola hasta Rio
trabajamos en el mismo antro,
ella vendía su silueta
yo tocaba la trompeta en una banda de jazz.
El viaje siguió en Venezuela
la vida era nuestra mejor escuela,
trabajabamos en el mismo antro
la comida y la vida era un espanto.
Cómo olvidarme de Martha
aquella stripper de la Recoleta
Si me dejó un par de huellas
en el cuello y en la vida
Cómo olvidarme de Martha.
Por fin llegamos a México
aquí todo cambia a éxito,
ella consiguió su sueño
de convertirse en modelo.
Y yo solo soy un triste cantautor