Te fuiste lejos, mi viejo amigo,
¿Ahora a quién consejos voy a pedir?
A esta parodia le falta un mimo
y del libreto vas a salir.
Acá en la calle está tu teatro
y el primer acto vas a morir.
Para ser todos y de todo un poco,
para que llore o me hagas reír.
Si de la sombra nacen los soles,
aún quedan noches que amanecer.
Pero me falta esta madrugada,
mi viejo amigo, que me aconsejes.
Y aquel galpón que ya no existe,
donde creciste y pude aprender,
todos los trucos que me enseñaste,
tan sólo con el arte de querer ser.
Si de la sombra nacen los soles,
aún quedan noches que amanecer.
Pero me falta esta madrugada,
mi viejo amigo, que me aconsejes.