La María,
tiene un sueño de mujer
donde hay mucho que perder
en un beso que elle dé.
La María,
que le importa padecer,
llegar a palidecer
en su loca fantasía.
Lo que no sabe la María todavía
es lo engañoso que resulta el oropel
Y mi cariño que por ella fué agonía
y que le dió felicidad con mi pobreza ya lo sé...
Y hasta veran, cómo al pasar
ya le dirán: La María de quién
la María de quién...
¡Ay la María de quien!
Coro:
¡Ay! la María que sueña todavía.