(J. M. Cano)
Sentía mucho por ti
y ahora, que siento igual de mucho,
no lo sé dividir.
Sentía que no perdía nada
buceando entre tus piernas
sin medir la brazada.
Se siente,
ahora juego de suplente;
que el que siente no presiente,
y de tanto que sentía,
no sentí que te perdía.
Yo sentía que
sentía por tu carril.
Sentía la incauta miopía
de no ver tu perfil.
Te dabas para no dar la cara,
que me ibas dando cuerda para que yo me ahorcara.
Se siente,
ahora juego de suplente,
que el que siente no presiente,
y de tanto que sentía
no sentí que te perdía.
Yo sentía que
sentía.
Se siente
tu sonrisa disidente,
coqueteando con la mía,
a mandíbula batiente.
Soy un diente
sin encía.
No me pidas que sonría.
Que estoy triste
vida mía