(Eh, discúlpeme, señora
¿La casa de Johnny Ventura es por aquí?)
(Ay, chiquillo, ahí en la esquina)
Hay cosas que me entretienen
Y otras que no me dan ganas
Yo quería grabar merengue
Porque eso me alegra el alma
Me fui sin pensar dos veces
Para la Dominicana
Podía pescar varios peces
Con una sola atarraya
Y como un rayo, salimos a buscar al caballo
Y como un rayo, salimos a buscar al caballo
Soy el caballo, me dicen Johnny Ventura
En el merengue tú sabes que hay estructura
Yo soy el negro que le pone sabrosura
Y para ti vamos a hacer una locura
Para escribir merengue estratosférico
Para cruzar niveles hemisféricos
Para olvidar asuntos del neolítico
Para sentir un choque electrolítico
Schubert, Mozart y Chopin, son sus canciones tan bellas
Pero nada se compara a un merengue de Quisqueya
Qué pato a la termidor ni qué patatas chorreadas
Nada le gana a un merengue a la Dominicana
Yo estaba en Santo Domingo, más famoso que mi gloria
Johnny, con su gentileza, me había llevado a la gloria
De repente como un rayo, a una mujer que pasaba
Le dijo "Milly Quezada, ven, que te presento a Carlos"
Y como si nada
Conocí a Milly Quezada
Y como si nada
Conocí a Milly Quezada
Llegaste a mi paraíso y ya viste cómo es la cosa
Disfrutando un buen merengue, ¡qué música tan sabrosa!
Colombia y Santo Domingo son dos tierras muy hermosas
Se abrazan en un merengue, y ¡ya tú ves cuánto se goza!
Porque la música es un ser
Que te hace renacer
Y se deja querer
Y te eriza la piel
Con su alma de mujer
Qué viaje pa'l exterior ni qué soufflé de Marsella
Nada le gana a tu amor y a un buen café en mi Quisqueya
Qué postre a la Benidorm ni qué manzana flambeada
Nada le gana a un merengue a la Dominicana